Irribarria y la concentración en el saque
La pelota a mano, como el tenis, es un juego muy psicológico. Por eso, no basta con ser el mejor. Es importante saber superar los momentos difíciles, de presión, de cansancio, o sobreponerse a un mal día o a un mal comienzo de partido. El objetivo es ganar pero también superarse a uno mismo. Mantenerse mentalmente ahí, controlar las emociones, es fundamental para cualquier deportista que está continuamente compitiendo. Una de las herramientas para conseguirlo es, sin duda, la concentración.
Para Iker Irribarria, estar concentrado es estar en el partido, tener el ritmo, hacer lo que vales, jugar lo que sabes.
Si Irribarria pierde la concentración… Me abstraigo de todo. Me olvido del público, de los fallos o errores que he cometido y pienso que el partido empieza de nuevo. A veces me resulta difícil lograr una concentración total pero, intentándolo una y otra vez, consigo seguir jugando como antes. Cuanto más concentrado estoy, más confiado me siento. Concentración y confianza están muy cerca, se relacionan entre sí.
La jugada que más confianza le da a Irribarria y entrena para el Manomanista es el saque. El tanto empieza desde el saque. La concentración y la confianza tienen que estar al cien por cien en tu mente antes del saque. Por eso, es la jugada que más entreno. El saque ayuda no sólo a ganar el tanto, sirve para ver todo el partido y para dar el segundo golpe, muy importante también. Sacar bien equivale a estar concentrado. No ensayo tantos saques como quisiera porque, en el manomanista, las manos sufren mucho y hay que cuidarlas.
El ángulo de un zurdo para el saque es diferente que para un diestro. Un zurdo está en desventaja a la hora de sacar, la postura no es tan natural. Siendo zurdo, me resulta más fácil sacar bien con la derecha que con la izquierda. Cuando sacas con la derecha, el cuerpo gira solo y la pelota sale de manera natural; el zurdo le tiene que dar más velocidad y meterla perfecta en la pared. Por eso hay cierta desventaja.
Pero el zurdo tiene una ventaja, cuando un zurdo bota la pelota para sacar ve al contrario, sabe si está atrás, si se adelanta o si está colocado adelante. Esa visión le permite ajustar el saque, esos segundos le permiten cambiarlo, sacar corto si está atrás, a la pared si el contrario ha adelantado su posición… Pero, en general, como digo, es más difícil sacar para un zurdo, menos natural.
La respiración, fundamental para la concentración. El frontón Labrit estaba lleno, yo estaba ganándole a Aimar… La tensión era enorme. La tensión, a veces, te deja muerto. Físicamente me encontraba bien pero a ratos me faltaba el aire. Estás al límite, con las pulsaciones a 100 o 200. Aimar, y los pelotaris como él, están más hechos, han jugado muchísimos partidos. Aimar sabe cómo descansar, cuándo, sabe dar esos tres o cuatro golpes antes del saque para coger aire… Son cosas que se aprenden.
A veces se me olvida que es fundamental saber respirar. Durante ese partido, utilicé los descansos para descansar, pero también para respirar. Aproveché todos los momentos que pude para coger aire, no sólo cuando estaba sentado, también mientras andaba, mientras probaba la pelota, pero siempre concentrado. Respiraba para darle la vuelta a todo, para centrarme y volver a sacar al cien por cien.